
Luna, la criptomoneda que fundase el surcoreano Do Kwon se ha hundido después de que la stablecoin a la que estaba unida, TerraUST, haya perdido su paridad con el dólar norteamericano. Los inversores en Luna han perdido el equivalente a 18.000 millones de dólares en inversión
Luna era, casi hasta ayer, una de las criptomonedas más prometedoras, pero en solo dos días se ha desplomado, perdiendo el 98% de su valor.
Decenas de miles de afectados han visto como perdían todos sus ahorros que habían invertido en la moneda que crease Do Kwon, el CEO de Terraform Labs.
Doblar su dinero en un año

Es el caso de muchos de los inversores en Luna, que en un caso concreto había permitido que los 40.000 euros de inversión iniciales se convirtiesen en el doble en solo un año.
Ayer, la aplicación desde donde gestionaba su inversión marcaba que sus criptoactivos en Luna valían solo 4 euros.
Luna se había convertido en una criptomoneda que había aguantado bien los embates de las crisis que habían afectado a otras monedas electrónicas, caso del Bitcoin.
Luna ha sido creada por Terraform Labs, una empresa cuyo CEO es el surcoreano Do Kwon, al que algunos calificaban como el Elon Musk asiático.
Los afectados por el hundimiento de Luna son en su gran parte pequeños ahorradores que habían visto en Luna una oportunidad de lograr unas rentabilidades que no se podían encontrar en inversiones más tradicionales.
Antes del hundimiento, el valor total del criptoactivo Luna llegaba a los 18.000 millones de dólares. Ahora Do Kwon ya ha empezado a sufrir las consecuencias.
Además de que está viviendo una crisis reputacional enorme, ha empezado a temer, incluso, por su seguridad personal, y ha llegado a pedir protección a la policía surcoreana, que le ha asignado varios escoltas.
El subidón del 2021

En el año que media entre febrero de 2021 a febrero del 2022, Luna se apreció un 15%, pasando de valer 4 dólares a algo más de 60.
Eso hizo que los inversores pensaran que en los siguientes años su inversión despegaría en una espiral alcista, por lo que muchos llegaron a invertir todos sus ahorros, que ahora han perdido completamente.
Luna se había convertido en una de las diez criptomonedas con una mayor capitalización, además de ser una en las que más estabilidad prometían a los inversores, ya que no había sufrido, en su historia, grandes alteraciones.
Muchos invirtieron todo lo que tenían, en un entorno en el cual la inversión tradicional, esto es, utilizando el sistema bancario, no daba más allá del 0%, cuando no había que pagar por tener el dinero en el banco.
Pero lo que realmente hizo derrumbarse a LUNA fue la caída de otra criptomoneda, TerraUST, que dejó de tener paridad con el dólar, lo que acabó hundiendo la moneda hasta su irrelevancia total.
A pesar de ello, son muchos los inversores que han decidido no vender su monedero de Luna, pensando que como ha sucedido con algunos criptoactivos, las tornas pueden cambiar y volver a recuperar su valor.
Apuesta por Bitcoin y Etherum

El hundimiento de Luna ha provocado que los inversores en criptomoneda hayan optado por redoblar su apuesta por el Bitcoin y el Etherum, dos de las monedas con un historial más estable en cuanto a su cotización.
Por lo general, aquellos inversores que tienen una cierta profesionalización en su inversión, por lo general suelen diversificar sus inversiones, y como se suele decir coloquialmente, no ponen todos los huevos en la misma cesta.
La mayor parte de los inversores de criptomonedas son jóvenes que se han lanzado a invertir en criptomonedas sin tener una adecuada cultura financiera, alentados por las altas rentabilidades que se pueden lograr.
Pero lo que no tienen en cuenta, al menos hasta que lo han perdido casi todo, es la alta volatilidad que tienen las criptomonedas, que pueden hacer, como ha sido el caso de Luna, en pocos días pierda todo su valor.
Un castillo de naipes

La causa primera de la caída de Luna fue que su criptomoneda de referencia, TerraUST perdió la paridad con el dólar.
TerraUST era la stablecoin, esto es, una criptomoneda que estaba «anclada» a otro valor de referencia más estable, en este caso el dólar norteamericano, lo que la hacía una criptomoneda «estable».
La pérdida de paridad de TerraUST hizo que Luna, por utilizar un símil circense, se convirtiese en un funambulista que avanza, en el alambre en altura, sin una red debajo en caso de caerse.
En solo siete días, los 30.000 millones de dólares de masa monetaria que atesoraba la criptomoneda hayan desaparecido.
Se estima que eran 600.000 los inversores que tenían en su poder la criptomoneda Luna como bien de inversión y que ahora lo han perdido todo.
Crisis reputacional

En cuanto se confirmó, vía Twitter, que Luna se había hundido, las redes sociales se «incendiaron» con todo tipo de comentarios.
La mayoría de ellos ponían el grito en el cielo contra las celebrities que habían recomendado invertir en esa criptomoneda, y no es para menos, ya que algunos inversores habían llegado a perder hasta 450.000 dólares.
Los que menos han notado el hundimiento de Luna han sido aquellos que o bien habían invertido cantidades modestas de dinero o que lo que habían invertido no lo necesitaban para vivir.
Afectando a otras criptomonedas

Luna no ha sido la única afectada por el hundimiento, ya que ha arrastrado a la baja a otras criptomonedas, como es el caso de incluso el Bitcoin.
Son miles de millones que se han perdido en la cotización de determinadas criptomonedas, que en el caso del Bitcoin ha supuesto la pérdida del 11% de su valor de cotización.
En una medida desesperada para evitar la caída en la irrelevancia de Luna, el creador de TerraUST, el ya citado Do Kwon, invirtió 750 millones de dólares para evitar que la stablecoin perdiese su paridad con el dólar norteamericano.
Pero todo fue inútil, y la pérdida de la paridad de TerraUST se llevó por delante Luna, que en estos momentos que escribimos esto, solo vale centavos de dólar norteamericano.
Fuente – EL PAÍS / EL MUNDO / BBVA
Imagen – Sean MacEntee / Portable Antiquities Scheme / Flemming Munch / Michael Pereckas / crabchick / Twitter / Computer Hoy